lunes, 14 de enero de 2013

La magia se toma un descanso

Normalmente estoy triste. Naturalmente, soy triste.
Quizá siempre me llueva dentro o no me acostumbre del todo a ver llover.
Pero llueve.
Y pierdo las ganas y decido llover.
Me escondo, me inundo y adiós a todo aquello que prediqué ayer.
¿Dónde está la magia y por qué se ha ido justamente hoy de vacaciones?
Estoy cansada de estar sola, pero no sé convivir con ella,
Y yo sólo quiero que me arrope, que me quiera,
Pero se va...
Porque no quiere quererme, porque no sabe sin descansar.

3 comentarios:

  1. Quizás es que tu alma se ha ido a pasear y aún no ha regresado. Tal vez por eso te sientes sola.

    ResponderEliminar
  2. La magia siempre vuelve... dale tiempo.

    Besos!

    ResponderEliminar
  3. Porque tú eres la magia, y no puedes estar brillando siempre.

    ¿Has oído hablar del Ave Fénix? Compárate con él. Piensa que eres magia y cada vez que nos haces sonreír (a mí, a Tequila, a Cló, a la Chica Huracán, a B...y a mucha gente más que yo no conozco), te gastas un poquito. Luego te dejas llover, te deshaces, te diluyes como una vena desangrándose. Hasta que sólo eres agua que, al cabo de poco, se evapora. Y allí, en el cielo, formas un arcoiris.

    Vuelve la magia, vuelves tú.

    De todos los colores, en el cielo, inalcanzable, con el propósito de hacernos sonreír de nuevo.

    (Y no hace falta que diga que lo consigues, pequeña Mandarina.)



    M.

    ResponderEliminar